03 Remedios de su madre

Prudencia, madre de Priscilo, tenía un recetario para curar heridas por quemadura, sanando quemaduras provocadas por lumbres y sartenes hirviendo. En cuanto a los catarros, conocía remedios naturales como la cocción del vino. Al no haber médico en Sarnago, había desarrollado todo el conocimiento relacionado con la salud, destacando el conocimiento adquirido durante sus años de sirvienta.