LUIS JAVIER PÉREZ GARCÍA
En la escuela había 60 niños y niñas. En clase les repartían leche en polvo y queso amarillo. En las paredes del aula solía haber dos mapas, dos encerados, además de fotografías de José Antonio Primo de Rivera y Franco. Tiene un buen recuerdo de su maestra y dice que era muy buena. A la escuela solía ir el cura para la doctrina y tenían que rezar. Les mandaban tarea para casa y de vez en cuando también les castigaban quedándose más rato en clase. Terminó el ciclo escolar con 14 años y con 16 empezó a trabajar como pastor y también hizo su primera trashumancia.