YOLANDA BLÁZQUEZ VALLORIA
Durante la trashumancia, llevaban un manso por detrás del rebaño y mastines pastores. Cuando llamaban a las ovejas reconocían la voz, además de conocer el camino que podía durar unos 40 días hasta Badajoz. Las ovejas llevaban cencerros comprados en ferias de ganado, mientras los collares los iban arreglando poco a poco. Su padre le contaba algunas anécdotas de lobos y maquis, ya que tuvo una experiencia muy dilatada en el tiempo. Además, el padre bajaba con caballos, yeguas y burros a modo de animales de carga. Habla de la higiene y las condiciones para dormir de antaño.