36 Trashumancia de ganado

FELISA VALORIA VERGUIZAS

Felisa estuvo diez años trabajando en la trashumancia, bajando con las ovejas en tren, en camiones y en furgonetas hasta Extremadura. En Extremadura trabajaban en una finca en la que les trataban como si fueran de la familia, hospedándose en la casa de los señores. Al volver de la trashumancia no había fiesta ya que sólo querían llegar a casa para descansar. Hubo años que la trashumancia daba para vivir, dependiendo de la cantidad y calidad de los pastos y lo lluvioso que hubiese sido el año. Si bien arrendaban los prados para el pasto, acabaron comprándolo para arrendarlo.

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